
En la visita a los enfermos del Hospital Militar entregamos un mensaje de esperanza y consuelo a quienes se encuentran internados por alguna circunstancia de salud, así como a sus seres queridos y acompañantes, a través de la Fe que profesamos y que proviene de la Palabra de Dios y su misericordia.
Escucharlos, también hace parte de nuestra misión en su proceso de sanación integral, buscando ayudarles, a través del encuentro y la fraternidad, a sanar las enfermedades del alma.
Encontrar pacientes que sonríen a pesar de las dificultades y que muchos de ellos, se encuentran lejos de sus familias, nos hace regresar a casa, cada sábado con el alma llena de admiración por la Fe que los acompaña y valorando aún más el don de la vida y los regalos permanentes que recibimos de Dios